Señor, espada candente que cercenas implacable nuestros más hondos deseos... Señor, torrente bravío que acabas por arrastrar al que no quiere seguirte... Señor, pétrea fortaleza que resiste los embates del desleal y del indigno... ¡Oh ciclón cuya embestida desarraiga para siempre las raíces más profundas, ten compasión de nosotros! (ERNESTINA DE CHAMPOURCÍN, Presencia a oscuras)
Si llamo a Dios a veces comunica -tiene tantas llamadas-. Marco su número y yo quedo marcada, con su silencio útil. Os llamo y llama. Os llamo desde mi alma azul que es un teléfono -yo sola en la cabina de mi pecho- os llamo amigos cuando Dios me dice: LLámalos, Gloria, que los tienes cerca. (GLORIA FUERTES, Historia de Gloria)
|
Lo más triste de Dios es que no puede creer en Dios. Ni ponerse el sombrero nuevo para ir a misa como tú y como yo. Tampoco puede dar gracias al Señor. ni hacer novillos ni tirar una piedra a un farol.
¿Qué sería sin nosotros de Dios? (GLORIA FUERTES, Obras incompletas) |
LA POESÍA Y LAS POETAS. BANCO DE TEXTOS.
DIOS
Obra publicada con Licencia Creative Commons Reconocimiento Compartir igual 4.0