Cada lengua es una especie única en el ecosistema lingüístico global. De hecho, como ya sabes, una lengua es también un ecosistema en sí misma, llena de historia, cultura e identidad. El gallego, tu idioma, es una de estas especies valiosas y, por tanto, un ecosistema que se debe proteger, cuidar y conservar de manera sostenible para que las generaciones futuras puedan disfrutar de él. Cuando la inteligencia artificial aprende y se desarrolla, debemos asegurarnos de que también pueda entender y respetar esta diversidad, y no ser un factor desequilibrante, del mismo modo que las especies invasoras pueden perjudicar y resultar nocivas para un ecosistema complejo pero armónico. Imagina un futuro donde los asistentes virtuales, las aplicaciones de traducción y los programas educativos puedan hablar gallego con tanta fluidez y naturalidad como cualquier otro idioma, y por tanto contribuir a la protección, cuidado, conservación y sostenibilidad de las distintas lenguas.