Al organizar un evento de las características de la Fiesta del Patrón, siempre hay que tener en cuenta los imprevistos. Si no creéis lo que os digo, atended a la historia que nos cuenta Ana, una de las organizadoras de la edición anterior:
"Justo acababa de comenzar la fiesta del patrón en el pueblo y mi amiga María y yo no veíamos el momento de que tocara el timbre en clase para ir corriendo a la feria. ¡Habíamos trabajado tanto diseñando los juegos y montando las casetas! Por fin, llegaba el momento de abrirlas al público. Como nos moríamos de hambre y todavía teníamos un poco de tiempo, paramos en el primer puesto de comida que vimos, un food truck en el que vendían hamburguesas. Cogimos unas que traían hasta una loncha de queso San Simón. Hummmm... ¡qué ricas!
Mientras María atendía una llamada de su madre, ¡ocurrió el accidente! Una gota de kétchup de mi hamburguesa cayó en el cuaderno de mates de María, ensuciando varias páginas. ¡Tenía que arreglarlo! A primera vista, ¡parecía imposible! Pero con un poco de paciencia, logré recomponer lo que había estropeado."
¿Cómo logró Ana arreglar el desastre en el cuaderno de María? ¿Lograrás averiguar qué se esconde bajo las manchas de kétchup?