PEDRO. ¿Usted... ha sido soldado toda su vida?
CABO. (Apura el coñac.) Sí.
PEDRO. (Tratando de conversar conél.) ¿Cuánto tiempo hace que viste el uniforme, cabo? Es una forma de preguntarle cuántos años tiene.
CABO. Tengo treinta y nueve... A los diecisiete ingresé en la Legión, pero desde pequeño era ya soldado... Me gustaba...
PEDRO. (Ríe.) ¡Es usted un hombre que no ha llevado corbata nunca, cabo! (Una pausa. PEDRO deja de reír. Un silencio.)
CABO. Éste es mi verdadero traje. Y vuestro verdadero traje ya para siempre. El traje con el que vais a morir. (Ante el gesto de los otros se ríe él. Ellos se miran con inquietud. El gesto del CABO se endurece, y añade:) Éste es el traje de los hombres: un uniforme de soldado. Los hombres hemos vestido siempre así, ásperas camisas y ropas que no protegen del frío ni del calor... Correajes... El fusil al hombro... Lo demás son ropas afeminadas..., la vergüenza de la especie. (Mira a JAVIER detenidamente. Éste finge que se le han empañado las gafas y las limpia.) Pero no basta con vestir este traje..., hay que merecerlo... Esto es lo que yo voy a conseguir de vosotros..., que alcancéis el grado de soldados, para que seáis capaces de morir como hombres. Un soldado no es más que un hombre que sabe morir, y vosotros vais a aprenderlo conmigo. Es lo único que os queda, morir como hombres. Y a eso enseñamos en el ejército.
PEDRO. Cabo, había oído decir que en el ejército se enseñaba a luchar... y a vencer, a pesar de todo.
CABO. Para luchar y vencer, antes es preciso renunciar a esta perra vida. Vosotros no habéis renunciado aún, ¿verdad? Todavía os queda un cochino resquicio de esperanza. No sois soldados. Sois el desecho, la basura, ya lo sé..., hombres que sólo quieren vivir y no se someten a una disciplina. ¡Indisciplinados y cobardes! Bien. Vais a tragar la disciplina del cabo Goban, la disciplina de un viejo legionario. Necesito una escuadra de soldados para la muerte. Los tendré. Los haré de vosotros. Los superiores saben lo que han hecho poniendo esta escuadra bajo mi mando. Voy a ir con vosotros hasta el final. Voy a morir con vosotros. Pero vais a llegar a la muerte limpios, en perfecto estado de revista. Y lo último que vais a oír en esta tierra es mi voz de mando4. ¿Qué os parece la perspectiva?


A

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